5 tips para trabajar la comunicación positiva en familia

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La educación de los niños empieza en el seno familiar. La buena comunicación es la clave para estrechar y mantener una relación sana entre padres, hijos, primos, abuelos, tíos y demás miembros. Una comunicación positiva se traduce en confianza. Por ende, si hay confianza, desarrollará un vínculo familiar mucho más fuerte.

Mantener el buen trato en la familia no siempre es fácil y cada día hay menos tiempo para compartir y dialogar. Las múltiples tareas y las largas jornadas de trabajo son algunos de los problemas que impiden una verdadera comunicación.

Sin embargo, pese al escaso tiempo con el que contamos, es necesario y posible aprender estilos adecuados de comunicación con nuestros hijos para apoyarlos si tienen problemas, saber qué es lo que piensan y que sepan que pueden confiar en y contar con nosotros.

Por eso, es importante conocer estrategias que permitan desarrollar una comunicación positiva y exitosa en este y todos los ámbitos de la vida. Así, además, fomentaremos una crianza más respetuosa.

¿Cómo puedo aplicar la comunicación positiva en mi familia?

1. Estar disponible

Tener aunque sea 10 minutos por día, sin distracciones, para tener una charla con tu hijo puede marcar una gran diferencia en la creación de buenos hábitos de comunicación. Hábitos como apagar la televisión o dejar el celular a un lado durante las comidas, por ejemplo, pueden ayudarte para darle atención completa. Sentarse y mirarlo mientras habla puede ser uno de los momentos más valiosos que tengas, ya que podrás escuchar su opinión y el niño la tuya. 

2. Ser empático

Esto significa sintonizar con los sentimientos de tu hijo y hacerle saber que comprendes la situación. Si tu hijo está triste o disgustado, una caricia suave o un abrazo pueden hacerle saber que comprendés esos sentimientos tristes o negativos. No es necesario que le digas qué pensás o sentís. Permitile a él expresar esos sentimientos y asegurate de no minimizarlos.

3. Ser el ejemplo 

Ser un ejemplo a la hora de hablar es muy importante; demostrarle que podés establecer una charla sin gritar ni discutir le permitirá a ellos hacer lo mismo tanto con los padres como con otras personas. El ejemplo será lo que más les enseñe.

4. Mantener la calma 

Existen momentos en que todos los padres sienten que se les agotó la paciencia. Sin embargo, siempre es importante encontrar distintas maneras de ayudar a su hijo a portarse bien sin herir sus sentimientos. Podés tomarte cinco minutos antes de comenzar a hablar o intentar de buscar palabras que no sean tan duras para él. 

5. Felicitar la honestidad

Cuando uno de los miembros de la familia admite haber cometido algún error, más allá de reprender el hecho en sí, es importante felicitarlo por su honestidad.

Se requiere de un gran valor para admitir un error, especialmente de parte de los hijos. Los padres deben tomar las medidas pertinentes al respecto, pero es bueno reconocer  el hecho de que haya sido honesto.

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