Personalizar las preferencias de consentimiento

Usamos cookies para ayudarle a navegar de manera eficiente y realizar ciertas funciones. Encontrará información detallada sobre cada una de las cookies bajo cada categoría de consentimiento a continuación.

Las cookies categorizadas como “Necesarias” se guardan en su navegador, ya que son esenciales para permitir las funcionalidades básicas del sitio web.... 

Siempre activas

Las cookies necesarias son cruciales para las funciones básicas del sitio web y el sitio web no funcionará de la forma prevista sin ellas. Estas cookies no almacenan ningún dato de identificación personal.

No hay cookies para mostrar.

Las cookies funcionales ayudan a realizar ciertas funcionalidades, como compartir el contenido del sitio web en plataformas de redes sociales, recopilar comentarios y otras características de terceros.

No hay cookies para mostrar.

Las cookies analíticas se utilizan para comprender cómo interactúan los visitantes con el sitio web. Estas cookies ayudan a proporcionar información sobre métricas el número de visitantes, el porcentaje de rebote, la fuente de tráfico, etc.

No hay cookies para mostrar.

Las cookies de rendimiento se utilizan para comprender y analizar los índices de rendimiento clave del sitio web, lo que ayuda a proporcionar una mejor experiencia de usuario para los visitantes.

No hay cookies para mostrar.

Las cookies publicitarias se utilizan para entregar a los visitantes anuncios personalizados basados ​​en las páginas que visitaron antes y analizar la efectividad de la campaña publicitaria.

No hay cookies para mostrar.

Los beneficios de la lactancia prolongada para la madre y el hijo

La duración de la lactancia materna es un tema que varía en diferentes culturas y sociedades. Mientras que en algunas culturas es algo normalizado y aceptado, en los países occidentales puede enfrentar estigmatización y desaprobación. 

La duración de la lactancia materna es un tema que varía en diferentes culturas y sociedades. Mientras que en algunas culturas es algo normalizado y aceptado, en los países occidentales puede enfrentar estigmatización y desaprobación. 

 Llamarla “lactancia prolongada” puede llevar a malentendidos, ya que implica que dura más de lo esperado, cuando en realidad no debería ser percibida de esa manera. Es fundamental comprender que la lactancia materna es igualmente válida y beneficiosa tanto a los tres meses como a los tres años, sin importar distinciones arbitrarias.

 La lactancia prolongada ofrece beneficios tanto para el bebé como para la madre. Algunos de los beneficios incluyen:

  • Refuerzo inmunitario continuo: Brinda protección contra enfermedades y ayuda a fortalecer el sistema inmunológico del bebé a medida que crece. 
  • Prevención de enfermedades: Se relaciona con una reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares y obesidad infantil, tanto en la infancia como en la edad adulta.
  • Vínculo emocional: Crea un vínculo especial entre la madre y el bebé, brindando seguridad y consuelo.
  • Beneficios emocionales: Estudios han demostrado que las lactancias prolongadas están asociadas con menores niveles de ansiedad en la adultez y un mejor ajuste social en los niños.

 Para las madres, la lactancia prolongada también tiene ventajas, como:

  • Protección contra el cáncer: puede reducir el riesgo de cáncer de mama, ovario y endometrio en las madres.
  • Reducción del riesgo de osteoporosis y diabetes tipo 2.

No existe un límite específico ni evidencia científica que respalde el destete en una edad determinada, aunque generalmente ocurre alrededor de los 4 años. La duración de la lactancia debe ser una decisión personal de la madre y el bebé. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) la recomienda exclusiva durante los primeros seis meses y continuar con ella al menos hasta los 2 años.

 Es importante respetar las elecciones individuales de las madres y evitar juzgar o estigmatizar la lactancia prolongada. El destete natural suele ocurrir entre los 2 años y medio y los 7 años de edad, y cada niño y madre tienen su propio ritmo. 

Compartir