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¿Por qué es importante vacunar a tus hijos?

Las vacunas son una forma de prevenir enfermedades infecciosas al entrenar el sistema inmunológico del cuerpo para reconocer y combatir un patógeno específico, como un virus o una bacteria. Producen defensas, genera que tu cuerpo esté preparado y si tenés riesgo de contagiarte, hace más leve la situación. La vacunación es una estrategia de salud pública preventiva y altamente efectiva por eso vacunar a tus hijos desde chicos es importante por varias razones:

  • Protección contra enfermedades: Como nombramos, las vacunas protegen a tus hijos contra enfermedades graves que pueden causar complicaciones a largo plazo o incluso la muerte. Al vacunar a tus hijos, los estás protegiendo contra enfermedades como la polio, el sarampión, la varicela, la tos ferina, la meningitis y muchas otras.
  • Protección de la comunidad: Las vacunas no sólo protegen a tus hijos, sino que también protegen a la comunidad en general. Cuando la mayoría de las personas en una comunidad están vacunadas, es menos probable que las enfermedades se propaguen. Esto es especialmente importante para las personas que no pueden recibir ciertas vacunas debido a problemas de salud.
  • Ahorro de costos: La prevención es mucho menos costosa que el tratamiento de enfermedades graves. Las vacunas son una forma efectiva y económica de prevenir enfermedades, lo que significa que ahorrarás dinero en gastos médicos a largo plazo.
  • Responsabilidad cívica: La vacunación de tus hijos es una responsabilidad cívica importante. Al vacunar a tus hijos, estás haciendo tu parte para proteger a la comunidad y contribuir a la salud pública.

Vacunar a tus hijos es una manera importante de proteger su salud y la de la comunidad en general, al mismo tiempo que se ahorra costos y se asume una responsabilidad cívica importante. Las vacunas infantiles salvan entre 2 y 3 millones de vidas cada año. 

Sin embargo, según la Unicef, todavía existen millones de niños en el mundo que no reciben vacunas. En ocasiones, sus familias no tienen la información suficiente sobre sus beneficios y tienen miedo debido a los falsos mitos sobre las vacunas o simplemente no tienen acceso a ellas.

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